La Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) firmó este jueves un convenio con el Consejo Nacional de Bioética, el cual servirá para que los más de 42 mil estudiantes de la máxima casa de estudios, de todas las unidades académicas, tengan una menor enseñanza, no solo en materia de conocimientos específicos en sus respectivas áreas, sino también en su formación como seres humanos.
Afirmó lo anterior Rubén Ibarra Reyes, rector de la UAZ, al encabezar la firma de este convenio con Patricio Santillán Doherty, presidente de la Comisión Nacional de Bioética, en evento realizado en el teatro Fernando Calderón.
En el evento, el mensaje inaugural corrió a cargo del doctor Enrique Argüelles Robles, presidente del Consejo Estatal de Bioética y director fundador de la escuela de Medicina Humana de la UAZ, en 1952.
En su alocución, Argüelles Robles dio la bienvenida a los representantes de autoridades universitarias y civiles, recordando que el consejo local de bioética, dijo, “tiene como responsabilidad darle a la vida biológica, el sentido ético que forman los valores humanos. Desde su fundación a estudiando, analizado y difundido esta idea”.
Con este convenio que ahora firmamos –dijo Argüelles Robles-, “ojalá y se cumplan nuestras esperanzas, no nada más en la bioética clínica en los hospitales, sino en todo el ámbito del ecosistema que tanto nos preocupa”.
Luego intervino Patricio Santillán Doherty, presidente de la Comisión Nacional de Bioética, quien dijo que el organismo de Zacatecas en la materia, encabezado por Argüelles Robles, está tan bien estructurado y se maneja de una manera tal, que “yo he puesto a este consejo como ejemplo de funcionalidad, en comparación con todos los demás consejos que existen en el país”.
Santillán Doherty recordó que la bioética es parte inherente de la vida humana, y “el comportamiento que debemos a nuestros conciudadanos, a nosotros mismos, debe ser evaluado, bajo principios y valores que se establecen en la bioética. El trabajo en hospitales, con pacientes, en la experimentación animal y otros tipos de investigación científica, son la base que sustenta lo que se hace en medicina”.
Asimismo, recalcó la importancia de la bioética en el conocimiento científico, y expuso cómo, la humanidad se beneficia de ello: “Estamos saliendo de una pandemia en la que llevamos dos años. Hace dos años y medio no sabíamos de qué se trataba. En menos de un mes se secuenció el virus y se iniciaron los trabajos para intentar hacer una vacuna, y se produjeron muchas vacunas. En 6 meses estaban aplicándose a nivel mundial. Esa es una maravilla, pues el poder de la ciencia es lo que hace avanzar a la sociedad”.
Pero expuso Santillán Doherty, “el poder de la ciencia sin guía no debe dejarse solo. Esa guía son todas las acciones humanísticas, y dentro de ellas, la evaluación bioética, lo que se está haciendo con el poder del conocimiento bioético y científico, debe ponerse en revisión constante, de su pertinencia y validez. Si no tenemos eso, conforme a valores humanísticos, esa tecno-ciencia se debe de poner en duda. Y no queremos ponerla en duda, queremos que ayude a la sociedad”.
“Este convenio con la UAZ, ayuda a la interacción de distintos grupos con intereses similares, desde puntos de vista distantes. Trabajo interdisciplinar y multidisciplinar… este convenio, sin duda nos va a permitir hacer otros convenios que ya se están firmando entre otras comisiones y universidades del país, bajo la luz que significa la guía de la bioética, y el doctor Enrique Argüelles es un ejemplo de la luz que nos puede dar a todos”.
Por su parte el anfitrión, el rector Rubén Ibarra Reyes destacó que la firma de este convenio con el Consejo Nacional de Bioética beneficiará a los más de 42 mil estudiantes universitarios de la UAZ.
Para la universidad es fundamental fortalecer a través de este tipo de convenios las relaciones interinstitucionales con instancias y dependencias, asociaciones, industrias, colectivos, “pues estamos seguros de que el trabajo en común, y colaborativo, facilitan la resolución de problemas”.
De paso dijo el rector “nos ayuda a fortalecer a nuestros más de 42 mil estudiantes universitarios, una educación de calidad y excelencia, que los formen como ciudadanos, que incidan en el desarrollo de su realidad social inmediata, por supuesto en el marco de la ética, del humanismo y del pensamiento crítico”.
Ibarra Reyes recalcó que este convenio con el Consejo Nacional de Bioética “redundará en una cercana colaboración, provechosa para nuestras unidades académicas, en donde no solo se enseñen conocimientos, sino que también se involucran valores humanos”.
